Da calambre
Por Jacobo Tarrío
10 de diciembre de 2006

Tengo un SAI. Estas siglas vienen a significar “Sistema de Alimentación Ininterrumpida”. Un SAI es un aparato que tiene una batería en la que se acumula energía para, en caso de que se vaya la luz (o de que haya picos o valles de tensión), permitir que otro aparato siga funcionando. Normalmente, los SAI se utiliza para proteger ordenadores. En otros países, a los SAI se los conoce como UPS, por las siglas en inglés, aunque yo me resisto a llamar a esos aparatos igual que a una empresa de paquetería.

Como decía, tengo un SAI. Entre las piezas que componen un SAI está un dispositivo que mide la tensión de la red eléctrica. La idea es que si ésta sube demasiado (pico) o baja demasiado (valle) o se va del todo (corte), se pueda detectar a tiempo de activar la alimentación por batería. Los SAI tienen también un cable mediante el que se puede monitorizar el estado del SAI: carga de la batería, duración estimada, y, por supuesto, tensión del suministro eléctrico.

Tenía curiosidad por ver cómo oscila la tensión de la red eléctrica a lo largo del día, y gracias a esta función de monitorización y un par de scripts, pude hacer un gráfico de la tensión de la línea a lo largo de las 24 horas de ayer, sábado 9 de diciembre de 2006, en Santiago de Compostela.

Gráfico de la tensión del suministro eléctrico.

Cada división vertical son 2 voltios; cada división horizontal, 1 hora. El gráfico comienza por la izquierda a las 00:00 horas del sábado, y termina por la derecha a las 00:00 horas del domingo, justo 24 horas después. La discontinuidad que hay a eso de las 20:15 se produjo cuando desactivé el software de monitorización para cambiar una configuración en el SAI.

Primero, una observación: nominalmente, la tensión de la red eléctrica es de 230 voltios. Hace años era de 220, pero se armonizó con el resto de la Unión Europea, aprovechando que los aparatos se diseñan con ciertas tolerancias. Sin embargo, esta tensión sólo se alcanza durante las horas de la madrugada.

A lo largo del día, la tensión varía. Empieza a disminuir gradualmente a las 6 de la mañana, y entre las 9 y las 10 cae bastante rápido. Se alcanza la tensión más baja a las 13:30, y entonces vuelve a subir hasta las 15:00; a las 16:00 vuelve a descender hasta las 18:30; a partir de ese momento vuelve a subir.

Parece bastante razonable pensar que la tensión varía según el consumo eléctrico en cada momento, ya que estas oscilaciones se parecen bastante al ritmo de vida diario, y también a la curva de demanda eléctrica del mismo día proporcionada por Red Eléctrica.

Lo que no sé es si son realmente variaciones en la tensión de la red eléctrica, o si en realidad todo esto es debido a otras cosas que produzcan la apariencia de cambios en la tensión. De un modo u otro, la gráfica me parece bastante interesante. Debería probar a hacer otra un día normal entre semana…

Otros artículos sobre “Tirando Líneas (2005-2008)”.
Índice.
Salvo indicación en contrario, esta página y su contenido son Copyright © Jacobo Tarrío Barreiro. Todos los Derechos Reservados. Información sobre tratamiento de datos y condiciones de uso.